miércoles, 14 de octubre de 2009

Stepping Stone

RECUERDO QUE HACE MUCHO DIJE QUE NO QUERIA VOLVER A VER TU ROSTRO DE NUEVO PORQUE TU ESTABAS AMANDO, SI, ESTABAS AMANDO A ALGUIEN MAS
ME DI CUENTA QUE NO PODÍA CONTROLARME A MI MISMAY AHORA TE HAN TRAIDO DE VUELTA A MI VIDA. ENTONCES PUSE UNA CARA IGUAL A LA DE TU AMIGO; PERO CREO QUE LO SABES, TU SABES LO QUE ESTÁ SUCEDIENDO. PORQUE LOS SENTIMIENTOS EN MI ESTAN CRECIENDO FUERTES
PERO NUNCA SERÉ TU ESCALÓN HACIA ALGO NUEVO TÓMALO TODO O DÉJAME EN PAZ, NUNCA SERÉ TU ESCALÓN HACIA ALGO NUEVO ME MANTENDRÉ EN ESA POSTURA
TU SOLÍAS LLAMARME A CADA RATO Y VA A SER DEMASIADO DIFÍCIL PARA MI NO CRUZAR LA LÍNEA; LAS PALABRAS DE AMOR QUEDARON EN MIS LABIOS COMO UNA MALDICIÓNY ME DI CUENTA QUE SOLO EMPEORARÍAN LAS COSASY AHORA TIENES LAS AGALLAS PARA ANDAR JUGANDO DE LA MANERA EN LA QUE EL VIRTUOSO IRRUMPE EN MEDIO DE LA CANCIÓN. TU TIENES TUS PASATIEMPOS, PERO NO ME INVOLUCRES EN ELLOSY MIENTRAS MENOS ME DAS, YO MAS LO DESEO TONTAMENTE

MOVIMIENTO ROTATORIO

Podría decir ¡Gracias totales!, pero sonaría muy Argentino, además después tendría que usar un calzado plateado o formar una banda para posteriormente lanzarme de solista; además en este caso nadie se hace algún favor, si estamos ahí es por gusto propio. Lo admito, es algo raro el saber que dentro de la maldita urbanidad aún subsiste gente que piensa que realmente no eres un fantoche de mostrador, que se sienta junto a ti, comparte la mesa sin disfrazar su cuerpo de hipocresía.
Diferentes perspectivas, ropa, color e intensidad de lágrimas, accesorios. Somos cinco ¡una ronda de licor, yo invito!
Me reservo el derecho de admisión, pero ustedes sin dudarlo están cordialmente invitados.

domingo, 11 de octubre de 2009

jueves, 8 de octubre de 2009

TESTIMONIO ANÓNIMO

No hay variación si dijo que hoy no fue un buen día; hace semanas o quizá meses no tengo uno a mi medida. Pero justo éste, el reloj marcó la hora, tomé de prisa un baño y acudí a aquél lugar que detesto, por que en él abunda la gente ineficiente y sin escrúpulos. Aguardé cerca de treinta minutos sentada viendo la cara de aquella mujer que escribía interminables líneas; como si el sólo contemplarme diera pauta a su deducción del proletariado enfermo. En fin, me dio la hoja y vi que en realidad sólo me había recetado un descanso prolongado. Tenía prisa así que reservé mis maldiciones para una ocasión especial. Caminé a la salida, vi a la gente que me miraba como si estuviera infectada (algo muy común desde hace poco) y entonces el semáforo te detuvo, crucé la calle y oh sorpresa eras tú presumiendo tu nueva felicidad. Me propusiste subir y mis pies no supieron si mi mente había aceptado (Creo que si por que cuando abrí de nuevo los ojos te tenía junto a mi), me invitaste a desayunar por que te dio lástima ver como mis huesos se asoman de mi piel, caminamos hacia el restaurante y acaso pareciera que las edades se nos hubieran invertido; yo, tan demacrada y vieja mientras tú inyectado de la juventud que te regala tu nueva adquisición. En tanto, me platicabas de lo mal que ahora es tu vida pero que aún tienes fe de que las cosas mejoren ¡Sí, tu hablando de fe! No cabe duda que la otra te ha enseñado la cara opuesta del dios del que fuertemente renegabas.
No te critico, tu sed por experimentar cosas nuevas te ha llevado lejos
Te conozco y sé que no quisiste decir algo con relación a nosotros por temor a verme llorar; e hiciste bien, de todas maneras me hubiera quedado callada como tantas veces lo hice; el reloj seguía marcando su tic tac y era la hora de salir de aquel lugar; me tocaste el cabello y rememoré las caricias de perro fiel. Mientras, yo contenía mis ganas de hacer todo contigo.
Lo admito, me dio gusto verlo Señor, pero no se vanaglorie conmigo creyendo que después de tantos años se olvidan los defectos.

domingo, 4 de octubre de 2009

ESPACIOS EN BLANCO

Tengo un sueño recurrente, uno en donde manejo un automóvil de ajena propiedad y placas con terminación setenta y cinco. No puedo mantener el control, de repente escucho tu voz; esa que tantas veces me dijo al oído versos tibios, sin embargo ahora me cuestionas sobre si hoy iremos a jugar o sobre si tal vez visitaremos a mamá al cementerio.

¡No me presiones! es demasiado para mi verla tendida en un espejo de lodo y sarcasmo, como me mira con sus ojos asesinos y llora por que no soy la misma de antes. ¿qué quieres que le diga, que me he convertido en una puta miserable que ofrece su amor al primero que jura no hacerle daño?

Deja de atormentarme, hasta tu sombra está empeñada en destruirme.

Bah, pendejadas y nada más.